¿Qué habilidades definen a una buena facilitadora?
Quedas invitada a hacerte esta pregunta a ti misma antes de seguir leyendo. No hay respuestas erróneas. Esta es una lista de ideas desordenadas que salió de una reunión de facilitadores/as en Reino Unido, tal vez algo de ella sea útil. La clave: estar siempre dispuesta a aprender y a reflexionar sobre la propia práctica.
- La habilidad para ser consciente del grupo y observar las dinámicas del grupo en su conjunto
- Reconocer y nombrar a todas las personas que han alzado la mano y quieren intervenir, para que todas sepan quién irá a continuación.
- Ser capaz de conectar varias intervenciones, vinculando puntos en común así como nombrando desacuerdos.
- Escucha activa y capacidad de síntesis.
- Dando la bienvenida a todas las personas al espacio de reunión
- Conocer los nombres de las personas en la sala
- Manteniendo a las personas con los pies en la tierra, y tranquilas
- Delegar y compartir responsabilidad (en cuanto a ti y al grupo)
- Habilidad de transformar puntos de discusión en puntos de acción
- Asertividad, tacto, carisma aprendido…
- Habilidad de filtrar a través de mucha información para crear dirección
- No necesitas saber todas las respuestas. Las dudas se lanzan al grupo.
- Estar preparada. Conocer la agenda es importante.
- Analiza el contenido y la forma de las intervenciones, así como el uso de los gestos. Ocasionalmente refuerza cuando ayudan al buen funcionamiento de la asamblea y matiza cómo se podrían mejorar cuando no, ayudando a los participantes a entender qué comportamientos son más constructivos.